De Holanda ...... a la Oktoberfest de Munich!!
Como un torero a puerta gayola pero con aires bávaros, así me sentía yo el otro día en la Oktoberfest de Munich... Con buena planta y mejor figura, siempre al quite de camareras con mil jarras de cerveza en cada alero. Degustando cada trago en el coleto como recompensa a una faena de renombre propia de los pases a un vitorino.
Pero antes fue Holanda, donde las nubes cuando las hay pesan mas que en nuestra querida peninsula. Si la nuestra es la piel de Toro, aquella es tierra de leones, y nosotros allí perdimos en su momento, en esas garras de león, dineros, humildad, honores y verguenzas.

Pero antes fue Holanda, donde las nubes cuando las hay pesan mas que en nuestra querida peninsula. Si la nuestra es la piel de Toro, aquella es tierra de leones, y nosotros allí perdimos en su momento, en esas garras de león, dineros, humildad, honores y verguenzas.
Es curioso observar, nada mas entrar en el Rijkmuseum de Amsterdam, una pintura mural celebrando la paz entre las Españas y la no reconocida República de los Paises Bajos, y justo a la izquierda, una pintura en la que un barco holandés revienta un galeón español en Algeciras, como si de un triunfo se tratara en una gran batalla.... mentira.... eran piratas! Piratas o corsarios, tanto da una cosa como otra.

Grandes marinos fueron estos flamencos, y grandes descubridores de nuevas tierras pero tambien comerciantes y esclavizadores con sus grandes compañías de las indias occidentales y orientales.
Amsterdam se muestra amable despues de tantos siglos, el extrangero es bienvenido a pasear por sus calles y el español es recibido con interés, en el olvido quedó la enemistad y aquellas guerras intestinas que no interesaban ni a unos ni otros.
Y en mi regreso a tierras bavaras, me encontré con amigos con los que brindar y mojar las barbas en cerveza de calidad, siempre conservando nuestros básicos principios: sobriedad, austeridad y seriedad.
Grandes marinos fueron estos flamencos, y grandes descubridores de nuevas tierras pero tambien comerciantes y esclavizadores con sus grandes compañías de las indias occidentales y orientales.
Y en mi regreso a tierras bavaras, me encontré con amigos con los que brindar y mojar las barbas en cerveza de calidad, siempre conservando nuestros básicos principios: sobriedad, austeridad y seriedad.
1 Comments:
Te queda bien el traje de Bavaro. Que cabron como te habras puesto de cerveza.
Publicar un comentario
<< Home