Queridos amigos,
el Capitán esta mal, sufre al ver sufrir y tiene miedo... Mi madre fue ingresada ayer en el hospital, un TAC y unas manchas difusas en la cabeza... un susto de muerte... es jodido ver a tu madre derrumbarse y tu padre rompiendo a llorar... mantener la cabeza fría, abrazarla, sonreirle para reconfortarla es una tarea dificilísima que me ha tocado a mí, llorar en la soledad para no crear desesperanza, hacía mas de un año que no me pasaba. Solo pensar que la persona que te ha dado la vida, la educación, los valores, su amor y su cariño incondicional está al borde del abismo, me llena de una amargura inmensa y de una impotencia que me llena de rabia. Un tumor de hipófisis, dentro de lo malo lo mejor. Hoy empiezan las pruebas, sé que os tengo a vosotros, mis amigos, os quiero. Pero la verdad es que todo queda a un margen cuando tu sangre se ve afectada, mi madre es mi sangre, mi familia es mi sangre y todo lo demás, las ambiciones, las aspiraciones, lo material sólo son adornos. A los amigos los eliges a la familia no, pero es la familia la que siempre está ahi, cuando la cagas, cuando tienes éxito, cuando estás enfermo; puedes ser el mayor cabrón pero tu madre estará ahi, detrás por si te caes. Ayer senti un vacío, senti que podía perder ese punto de referencia, que muchas veces infravaloramos... hasta que no pasa uno no se da realmente cuenta, nos dedicamos a darle importancia a cosas que no la tienen y que quizá no merecen la pena. Deberíamos dedicarnos a amarnos más, a abrazar a nuestros padres, hermanos... quiero a mi madre, quiero a mi familia y sería capaz de dar la vida por ellos que es lo que más valor tiene. Esta situación si es una tragedia, el sufrimiento de una familia, ¡Pak! un golpe seco de un coche que pudo acabar conmigo, este tumor que podría acabar con mi madre ¡Dios! eso si duele. Esta guerra acaba de empezar y haré lo que tenga que hacer.
Os quiero y sois luz dentro de estas tinieblas que me envuelven.
